Con la llegada del buen tiempo, llega también el momento de preparar tu piscina. Si quieres evitar imprevistos y disfrutar desde el primer día de un baño limpio, seguro y sin sorpresas, necesitas hacer una correcta puesta en marcha piscina.
Más allá de llenar con agua y añadir productos químicos, este proceso requiere una revisión completa del sistema de filtración, un análisis del agua y una limpieza en profundidad. En este artículo encontrarás una checklist práctica y detallada para que no se te escape nada.
Durante los meses fríos, la piscina permanece inactiva. Aunque haya estado cubierta, el agua puede deteriorarse, el sistema de filtración acumular suciedad, y pueden aparecer pequeñas averías que no se ven a simple vista.
Una buena puesta en marcha piscina permite detectar estos problemas a tiempo, equilibrar el agua y asegurarte de que todos los componentes funcionan correctamente. Es la diferencia entre disfrutar o tener que vaciar y volver a empezar a mitad de temporada.
Antes de hacer cualquier otra cosa, revisa la estructura de la piscina:
¿Hay fisuras en el vaso?
¿Las juntas están abiertas o desgastadas?
¿Las boquillas, escaleras y rebosaderos están firmes y limpios?
También comprueba el entorno: baldosas antideslizantes, zona de duchas, iluminación exterior. Todo suma a la experiencia de uso y seguridad.
Si la piscina ha estado cubierta, retira el cobertor con cuidado, límpialo bien y guárdalo seco. Luego elimina hojas, insectos, arena o restos de cal que se hayan acumulado.
Limpia paredes y fondo con un cepillo o limpiafondos automático. Este paso es fundamental: cuanto más minuciosa sea esta limpieza, menos productos químicos necesitarás después.
El nivel debe situarse justo por encima de la mitad del skimmer. Si ha bajado demasiado o si el agua ha estado estancada mucho tiempo, es recomendable vaciar al menos un 30 % y rellenar con agua nueva.
Puedes consultar nuestra selección de productos químicos para piscinas si necesitas acondicionar el agua tras el llenado.
El sistema de filtración es el corazón de tu instalación. Antes de encenderlo:
Limpia el prefiltro de la bomba
Comprueba que no haya fugas ni obstrucciones
Revisa la válvula selectora y el manómetro
Si usas filtro de arena, sustituye el medio filtrante si tiene más de tres años
Realiza un lavado y enjuague del filtro durante 3 minutos antes de ponerlo en ciclo normal.
Ya con la filtración activa, toca analizar el agua. Una puesta en marcha piscina profesional no puede saltarse este paso.
Valores ideales:
pH: entre 7,2 y 7,4
Cloro libre: entre 1 y 1,5 ppm
Alcalinidad: entre 100 y 150 ppm
Aplica productos reguladores según los resultados. Si es necesario, realiza un tratamiento de choque para desinfectar en profundidad.
Consulta esta guía para mantener el equilibrio: consejos para mantener el pH de tu piscina bajo control.
Ahora es momento de comprobar todos los complementos que influyen en la experiencia de uso:
Iluminación subacuática
Escaleras y trampolines
Limpiafondos y robots automáticos
Cloradores salinos o sistemas UV
Verifica conexiones, funcionamiento y desgaste. Si algo no funciona ahora, es más fácil de reparar que con la piscina en uso.
Una buena puesta en marcha piscina solo es eficaz si la sigues de una rutina de mantenimiento adecuada:
Analiza el agua dos veces por semana
Limpia el prefiltro cada 3–4 días
Cepilla fondo y paredes semanalmente
Controla la presión del filtro
Evitarás algas, turbidez, y desgaste prematuro de los equipos.
Hacer la puesta en marcha piscina tú mismo tiene muchas ventajas, pero si no tienes tiempo o quieres asegurarte de que todo queda perfecto, puedes contar con ayuda profesional.
En HydroSud ofrecemos servicio de puesta en marcha con técnicos cualificados y experiencia. Con más de 70 puntos en toda España, seguro que tienes uno cerca.
Así puedes empezar la temporada de baño sin preocupaciones, con tu piscina limpia, equilibrada y lista para disfrutar.
Se despide vuestra asesora de Grupo Piscinas.
Nos vemos en el siguiente blog.